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Imagen recuperada de Flickr Juan Luis Manfredi es catedrático de Periodismo y Estudios Internacionales en la Universidad de Castilla La Mancha |
¿Cómo se concreta el respeto a los lectores en el quehacer periodístico?
El respeto puede abrirse camino a la hora de preparar una entrevista sabiendo que la persona es realmente de interés público. Hay voces que no aportan valor ni beneficio alguno, más todo lo contrario, sin que haya necesidad alguna de darles protagonismo porque carecen totalmente de ese interés público.
El respeto también puede darse a la hora de convertir un hecho en noticia sin exagerarlo, más si ese hecho es un descubrimiento o avance científico cuya evidencia aún está en ciernes y se desconoce si existen conflictos de intereses o faltan conocimientos para manejar según qué información. A veces, no todo lo que es importante es noticia ni todo lo que es noticia es realmente importante.
Otra vía de respeto puede tener su base al contrastar la propia información y ofrecer una visión plural de la realidad, evitando sesgos y reduccionismos. Seleccionar no es sinónimo de sesgar, ni resumir de descontextualizar.
Incluso el respeto por el lector/a puede darse huyendo de la creación de titulares que buscan solamente el clickbait, fórmula engañosa con la que después de leer la noticia se cae en la cuenta de que se ha sido engañado por el sensacionalismo absoluto.
Decían incluso en algún manual de Periodismo que la corrección ortográfica también era una forma de respeto al lector/a.
No obstante, aunque el respeto por el lector/a en un medio no siempre dependa al cien por cien del periodista, el lector o lectora tiene también por su parte la responsabilidad tan manida de tener capacidad crítica con lo que lee.
Según RAE, etimológicamente la palabra respeto proviene del latín respectus que sería "acción de mirar atrás" y también "atención, consideración, miramiento", desde el periodismo al lector/a y del lector/a al periodismo. Concluyendo: mirar atrás sobre lo que se ha leído con atención, siempre que la información tenga al lector/a en consideración, no todo merece nuestra atención y más, si no hay respeto.